De todos es sabido que una de las grandes cunas del diseño de mobiliario del siglo XX es Dinamarca. Basta darse una vuelta por las tiendas de algunas de sus ciudades más importantes (especialmente Copenhague) o visitar la casa de algún danés para darse cuenta de cuán importante es allí el diseño y, sobre todo, cuánto cuidan a los grandes artífices del diseño.
Rasmus y Maria, él creativo, ella fotógrafa, viven junto a sus cuatro hijos en una vivienda de 150 m2 en el centro de la capital danesa. La pareja es una gran apasionada del diseño de su país, así que en su casa no es difícil encontrar, en casi cada espacio, algún icono del diseño del XX, de esos que todos conocemos y ante los que se nos cae la baba delante de las páginas de las publicaciones de decoración: sillas y sillones de Jacobsen, lámparas de Poul Henninseng, los animalitos de madera de Kay Bogesen... Pero también, como buenos amantes de la decoración, ambos saben apreciar (y combinar con los anteriores) sus hallazgos en mercados de pulgas y tiendas de segunda mano: piezas retro anónimas, juguetes coloridos... y las obras de arte. El resultado es una vivienda de estilo ecléctico que refleja perfectamente los intereses de sus habitantes.
Preciosa, ¿no os parece?
Procedencia de las imágenes: IBoligen