Junto a los suzanis se han convertido en unos de los elementos textiles más frecuentes, en los últimos tiempos, en las publicaciones de decoración y, curiosamente, ambos tienen, en su origen, una misma función. Me refiero a las Handiras marroquíes. Al igual que los suzanis, estas piezas son mantas de boda. Su origen es bereber y son usadas por la novia, como una capa, después de la ceremonia nupcial.
La tradición dice que deben realizarse a mano, unas semanas antes de la boda, por las mujeres de la familia de la novia, y su misión es dar buena suerte, alejar los malos espíritus.... Los materiales usados son lino, lana, algodón y lo que casi nunca falta son elementos brillantes, como lentejuelas.
En decoración las hemos visto como colcha, para cubrir la cama, sobre una pared, como elemento decorativo, o sobre el sofá. En cualquiera de esas funciones, las Handiras aportan un plus de elegancia. Con sus tonos suaves, neutros, casan genial con cualquier estilo, para dar un toque multicultural y son ideales como pieza étnica en el tan en boga estilo noretnic de mi amiga Dar Amina, en cuya tienda online podéis encontrar alguna handira.
¿A que son una preciosidad?
Todas las imágenes proceden de mis paneles de inspiración en Pinterest.