Hace tiempo escribí, en otro lugar, sobre este escritorio de la firma italiana Manoteca, pero hoy he vuelto a toparme con él y sigue sorprendiéndome igual que lo hizo la primera vez que lo descubrí. Está realizado con viejas ventanas recicladas, auténticas de comienzos del siglo XX. Cuando está abierto, cumple las funciones de un escritorio, con bolsillos de cuero y espacios para el almacenaje de los útiles de oficina, y cuando está cerrado puede usarse como mesa de comedor.
Una pieza muy original, con un poderoso toque vintage. Además, tendremos la certeza de que no hay dos idénticas, al mismo tiempo que nos aseguramos de estar contribuyendo a la sostenibilidad ecológica.
¿Qué os parece? ¡No me digáis que no es una pieza que respira autenticidad y que dará un toque muy especial a nuestro espacio de trabajo, o a nuestro comedor!
Más información: Manoteca