No es la primera vez (ni será la última) que el interiorista Erico Navazo aparece en el blog; tal es la admiración que siento por sus proyectos que ya me he ocupado de varios de ellos. En esta ocasión la tarea de Erico fue ayudar a un buen amigo con el replanteo y la nueva distribución de espacios (se trataba de dejar diáfano un piso de 40 m2, en un barrio castizo de Madrid, que anteriormente contaba con 3 habitaciones), asesorarle con la elección de acabados y con la ubicación de mobiliario y piezas de decoración que el propietario (agran amante del vintage midcentury) no deja de adquirir.
El resultado salta a la vista. Es muy Erico, en cuanto que no hay una acumulación de muebles y los que hay han sido perfectamente seleccionados. La paleta cromática es muy ténue, en tonos claros y amarronados, con pequeñas pinceladas de color más subido de tono en algunas de las lámparas, en los objetos decorativos, cuadros o en los textiles. Me gusta muchísimo, además, el estilo años 50 que se ha conseguido, pero sin llegar a parecer antiguo, ya que respira frescura y mucha personalidad.
¿Un must en esta vivienda? El conjunto del salón, sin duda, con ese estupendo sofá de piel color camel y la butaca nórdica enfrentada, butaca de la que, por cierto, tengo un par idéntico (con diferente tapizado) en el salón de mi casa de Vallejo. Os dejo una foto para que lo veáis:
Encantado de tener esta pequeña coincidencia con mi admirado Erico Navazo.
Procedencia de las fotografías: AD España