Como ya sabéis quienes frecuentáis habitualmente el blog, soy un ardiente defensor del eclecticismo decorativo, de la mezcolanza de estilos. No hay para mí nada más aburrido que esas casas en las que todo parece cortado por el mismo patrón, sin ninguna personalidad y sin pizca de vida, es decir, todo lo contrario a lo que debe ser una vivienda que, como su propio nombre indica, es un lugar donde se vive, donde se ve y se respira vida.
Es por ello que siempre me atraen este tipo de casas, como la que os muestro hoy. Situada en el barrio de Bromma, en Estocolmo (sí, lo sé, otra vez la capital sueca, es una debilidad, ¿qué le voy a hacer?), es la vivienda del presentador de la SVT Alexander Noren.
Con una decoración tranquila y sosegada, lo que más destaca de ella es la sabia mezcla de elementos provenientes de diferentes estilos y de diferentes épocas, en la que lo moderno y lo clásico conviven de manera ejemplar y, como muestra, las dos últimas imágenes, en las que un magnífico espejo de estética rococó acapara todo el protagonismo, rodeado de piezas modernas. El contraste de esta pieza con los muebles de la cocina, o con el sofá del salón es toda una declaración de principios.
¡Me encanta! ¿Y a vosotros?
Procedencia de las imágenes: Rumhemma