En decoración , una de las acciones más efectivas para dar un toque personal a los espacios es colocar un mueble u objeto decorativo desubicado de su lugar habitual o usarlo con otro fin para el que fue concebido. En este caso me ha llamado la atención el uso que se le ha dado, como cabecero, encima de la cama, a esta manta marroquí de boda (un regalo que suele hacerse en Marruecos a una pareja de recién casados).
Además de resaltar su belleza, establece un punto focal dentro del dormitorio. Es muy interesante, también, el sistema que se ha usado para colgarla de la pared, con una vieja rama de árbol. Un toque precioso en el dormitorio, en el que también hay que resaltar la magnífica composición que se ha organizado en torno a la mesilla de noche, con ese maletín de médico como protagonista del conjunto.
Un dormitorio en el que, a pesar de la aparente sencillez, la ubicación de cada uno de los detalles está muy pensada para lograr un ambiente sugerente y muy personal.
¿Qué os parece?
¡FELIZ FIN DE SEMANA!
Procedencia de las imágenes: Desire to Inspire