Este es uno de los sueños de muchos de nosotros, ¿verdad? Tener todas las comodidades que ofrece una ciudad, pero con muchas de las ventajas de la vida en el campo, como poner los pies en la calle y no pisar asfalto, sino terreno verde. Pues esto es lo que ha conseguido el matrimonio formado por Helen y Vegard en Oslo.
La pareja vio una casa muy grande, de la que se enamoraron inmediatamente, a pesar de que necesitaba una gran reforma. Junto a uno de sus amigos, que tenía el mismo sueño que ellos, vivir en la ciudad, pero con un gran jardín, compraron la casa, con la intención de dividirla en dos, y emprendieron la tarea de renovación de la casa. Las imágenes pertenecen a la parte de la vivienda del matrimonio.
Una decoración sencilla pero muy efectiva, que auna diferentes estilos y donde conviven piezas recuperadas con otras nuevas, de Ikea por ejemplo. Todo ello rodeado de los colores claros que protagonizan los revestimientos, casi en su totalidad. Las tonalidades de color las aportan sobre todo los textiles, que imprimen, además, una gran calidez al hogar.
Una casa en la que apetece vivir, ¿verdad?
Más información: Klikk